Los principales minoristas en línea rusos se opusieron a la introducción del impuesto sobre las ventas. Creen que supondrá una carga adicional para los jugadores de buena fe, mientras que la mayoría de los participantes del mercado ya utilizan esquemas de evasión fiscal.
La Asociación de Empresas de Comercio por Internet (AKIT) envió una carta al Presidente de la Federación de Rusia, Vladimir Putin, en la que habló en contra de elevar la carga fiscal.
La introducción del impuesto sobre las ventas "afectará principalmente al segmento legal del mercado empresarial de Internet, que opera en el comercio minorista, ya que pequeños jugadores sin escrúpulos eludirán el impuesto", dice AKIT. La asociación estima que la proporción de minoristas en línea que actualmente utilizan esquemas ilegales de optimización fiscal es superior al 60%.
Las empresas que respetan la ley también serán empujadas a la zona "gris", ya que un impuesto a las ventas del 3% duplicará la carga fiscal sobre los participantes del mercado. "Así, la introducción del impuesto a las ventas no asegurará un aumento en los ingresos del presupuesto estatal. Al contrario, esto, debido a la reducción de la base imponible, ayudará a reducir la recaudación de impuestos", dice el mensaje.
El Ministerio de Finanzas ha desarrollado un proyecto de ley que prevé la introducción del impuesto sobre las ventas a partir del 1 de enero de 2015. La base imponible se define como el valor de los bienes o servicios vendidos, incluidos el IVA y los impuestos especiales. La tasa impositiva será establecida por las entidades constitutivas de la Federación Rusa dentro del 3%.
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